Son muchas las ocasiones en que los clientes acuden al despacho y nos dicen que han dejado de abonar la pensión de alimentos, alegando que “gano menos dinero que cuando la pensión fue fijada”, “me vino una mala racha económica y me fue imposible pagar”, “tuve más hijos y ahora no soy capaz de seguir pagando la misma cantidad”…
Has de saber que todos estos motivos, a pesar de poder ser razonables y justificativos de un cambio en la situación económica que pueda dar lugar a modificar la obligación de pago de la pensión alimenticia, no pueden ser alegados ante una demanda ejecutiva en la que se reclame el pago de los alimentos.
Por lo que, ante la carencia de recursos económicos, lo procedente es acudir al incidente judicial de modificación de medidas definitivas, con el objeto de modificar el importe o suspender la obligación de abono de la pensión alimenticia.
Recuerda, ante la imposibilidad de abonar la pensión de alimentos, asesórate cuanto antes. Acude a tu abogado de familia de forma urgente para recibir asesoramiento especializado.
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